Descripción
Fundamentación
La música, como arte y ciencia, es una poderosa herramienta que fomenta el desarrollo integral de los niños y adolescentes. A través del aprendizaje de instrumentos musicales como la guitarra, la zampoña, el piano, el órgano electrónico y la batería, los menores no solo adquieren habilidades musicales, sino que también fortalecen su carácter y personalidad. La práctica de la música contribuye significativamente a su crecimiento emocional, social y cognitivo, y ofrece una vía para expresar emociones y construir identidad. Además, el proceso de creación musical, que incluye la fabricación de instrumentos como las zampoñas, les brinda una comprensión más profunda del arte y la técnica.
Logros Terapéuticos
El taller de música en CIMA tiene un profundo impacto terapéutico. A través de la música, los niños y adolescentes desarrollan disciplina, orden y responsabilidad. La práctica constante para perfeccionar ritmos musicales fortalece su capacidad de concentración y fomenta el trabajo en equipo, la expresión personal y la creatividad. La música activa áreas del cerebro relacionadas con el lenguaje, la matemática y la memoria, ayudando a combatir el estrés y promoviendo la relajación. Además, el dominio de un instrumento musical requiere compromiso y disciplina, lo que ofrece una gran satisfacción personal y eleva su autoestima. Este taller también mejora las relaciones interpersonales y el manejo emocional, siendo un recurso terapéutico clave en nuestro hogar.
Logros Formativos
La educación musical en CIMA no solo enriquece la sensibilidad artística de los menores, sino que también refuerza su formación integral. Los niños y adolescentes tienen la libertad de elegir los instrumentos y ritmos que desean aprender, lo que fomenta su autonomía y motivación. Aquellos que ingresan sin conocimientos previos reciben clases prácticas de ritmos básicos y avanzan gradualmente. El taller incluye clases de flauta, quena, guitarra, piano y batería, y aquellos alumnos que muestran mayor avance forman la banda de CIMA, presentando su talento en eventos externos. Este proceso no solo fortalece sus habilidades musicales, sino que también les da confianza y sentido de pertenencia.
Logros Productivos
El dominio de diversos ritmos e instrumentos musicales abre puertas a los adolescentes para su futuro profesional. Aquellos que perfeccionan sus habilidades pueden integrarse a conjuntos musicales, formar sus propias bandas o incluso seguir una carrera como profesores de música. El taller de música en CIMA no solo prepara a los jóvenes para la vida artística, sino que también les brinda herramientas valiosas para una vida autónoma y exitosa. Además, el desarrollo de competencias musicales contribuye a su reintegración social y les proporciona una fuente potencial de ingresos, promoviendo así su autosuficiencia.
